Florecer Espiritual - El desarrollo

La débil idea de un cortometraje se convirtió en un nuestro gran sueño.

¿Qué artista no ha soñado alguna vez con hacer una animación donde pueda poner un pedacito de él en cada frame?

Una frase:

Cuando empiezas a pensarlo más detenidamente, te das cuenta que toda la historia ha empezado por una frase. En nuestro caso, ha sido " Chicos, tenéis que hacer un corto animado".

Para muchos, eso suena a una obligación. En cambio, a nosotras se nos abrió todo un mundo por delante. Os imagináis que emoción siente un niño cuando le das un caramelo? Pues así estábamos.

No sueñes tu vida, vive tu sueño.

Cuándo estas en ese punto de éxtasis, te vienen un millón de ideas. Quieres hacer una obra de Disney, Pixar, DreamWorks, entre otros. Pero debes volver a la realidad. Darse cuenta que solo sois dos personas, con un tiempo limitado y con un proyecto de juego entre manos. Básicamente, sufrimos un golpe de la realidad, y tuvimos que acortar nuestros sueños. Pero eh! Las mejores cosas, han empezado por algo muy pequeño. Y nosotras, no nos quedaremos cortas.

Primerísima primera idea.

Pies.. ¿para qué los tengo si tengo alas para volar?

Os recordáis que dijimos que tuvimos que acortar las ideas? Pues bien, nosotras nos saltamos ese paso.

La primera idea consistía en una guardiana, debía reunir los 5 elementos : agua, aire, fuego, tierra y trueno, para poder salvar el bosque de la muerte y con él, el mundo entero. En busca de estos elementos, había de superar diferentes pruebas para conseguirlos. En el elemento del agua, representado por un hongo hecho de agua, el cuál no podía coger con la mano, así que se las tuvo que ingeniar. Con el elemento aire, representado por una pluma blanca de la águila come monos, tuvo que escalar una peligrosa montaña donde su vida corría riesgo constante. Los elementos restantes: el fuego, representado por una estrella fugaz, la tierra, representado por una joya incrustada en una piedra y por último, el trueno, representado por una luciérnaga. Al haber conseguido los cinco elementos volvió a su guarida, donde iba a realizar el ritual. Al acabar de leer su libro, vio que le faltaba un último ingrediente. Una alma. La guardiana tomó su decisión. Después de completar el ritual, ya no había rastro del monstruo, pero tampoco de ella. Y así, reinó la paz durante mucho tiempo.

Fue una de las primeras ideas, pero de las que más nos gustaron. Comentándolo entre las dos y haciéndole pequeños retoques, hemos llegado a la historia que hoy día todos conocéis.

El éxito es la suma de pequeños esfuerzo repetidos día tras día.

Una bonita frase, ¿cierto? Yo no sé que pensáis vosotros, pero nosotras cumpliremos nuestros sueños. Sabemos que no será fácil, pero no nos rendiremos porque lo mejor esta a la vuelta de la esquina.